lunes, febrero 26, 2007

Periodismo ciudadano

Visión periodística desde casa


Los periodistas han adquirido un papel fundamental en la sociedad ya que son capaces de transmitir una información que la mayoría de las veces es objetiva y fiel a la realidad. Sin embargo, en nuestros días, los ciudadanos de a pie también tienen voz en la transmisión de esas noticias. El ejemplo más significativo lo podemos encontrar en Ohmynews, un medio donde diariamente entran dos millones de personas que hacen la función de reporteros.

Este extremo puede generar numerosos problemas para la sociedad. Cuando un periodista emite un determinado artículo, suele escribir su nombre para dar la cara por si la información no es verídica. Sin embargo, en este tipo de periodismo participativo o ciudadano, los usuarios exponen una opinión que en ocasiones no está contrastada y puede modificar la realidad y confundir a los lectores. Encontramos un ejemplo más cercano en la página web Bitrir en Petrer o Plazacastelar en Elda inspirados en "Menéame" o "Bottup". Se trata de dos páginas en las que la participación de los usuarios registrados es fundamental para su desarrollo. Son ellos los que hablan sobre la realidad y destacan los temas más importantes de la jornada.

Pasados los cuarenta años de dictadura de Franco en los que no existía la libertad ideológica ni de expresión, podemos estar orgullosos de vivir en un país en el que cada persona desde su casa puede hablar de lo que se le antoje. Ahora bien, en las páginas citadas anteriormente, suelen haber comentarios donde el respeto y la actitud cívica no están a la orden del día. ¿Cómo podemos controlar que todo aquel ciudadano que quiera exponer sus ideas, sea respetuoso con la sociedad y con la gente que la compone?.

El periodismo ciudadano tiene sus pros y sus contras. Si se pudieran controlar las críticas poco constructivas y no sacarlas a la luz a no ser que tuvieran una razonamiento sensato, conseguiríamos darle a la gente del pueblo voz en los aspectos de actualidad, sin llegar a convertirse, por ello, en periodistas.

No creo que el periodismo ciudadano pueda aplastar a los medios tradicionales. Simplemente, es una función más de la sociedad, el poder hablar y ser escuchados sin tener que desplazar a los periodistas que ejercen una labor de investigación y que tienen una carrera profesional y académica que los avala.